El homicida es un brasileño que está prófugo y tampoco se ha podido encontrar el arma que utilizó.
Previamente, seis testigos protegidos van a declarar ante el juez Gaspar Ardao Amorín. Rossi fue asesinado de varios disparos en el tórax y en la espalda en una casa donde funcionaba una boca de venta de drogas.