Juan Carlos López llegó con Americando hasta José Pedro Varela para ser testigo del sacrificio de las maestras rurales, que día a día se trasladan varios kilómetros para darle clases, a veces, a un solo alumno.
La maestra María Alejandra Martínez vive en José Pedro Varela pero los lunes marcha con su moto por más de 30 kilómetros a su primer casa, la escuela, y luego del mediodía deja a sus cinco alumnos de la Escuela 76 de Sauce del Olimar Chico, y con su moto va por senderos, hace 15 kilómetros hasta la Escuela 62 donde atiende a tres niños. De allí, a las 17:00 otra vez regresa 15 kilómetros para atrás para volver a su escuela casa.