Habló sin tapujos en Código País sobre los principales temas que preocupan al gobierno.
¿Qué opina de la firma del acuerdo de los expresos de Guantánamo?
Yo quedé conforme con la actitud de Uruguay respecto a gente que ha sufrido, como los prisioneros de Guantánamo y los refugiados de la guerra de Siria. No puedo menos que alabar la decisión que tomó el gobierno anterior. Eso no quiere decir que podríamos haber tenido más previsiones.
Nosotros ya hemos comunicado a Acnur que las próximas familias que vienen de Siria vamos a postergarla para el último trimestre de este año y vamos a prepararlo de una manera un poco mejor. Pero conceptualmente lo importante es la actitud de Uruguay, es la apertura.
No se repetiría lo de los Maristas, estamos pensando en otro modelo donde puedan instalarse definitivamente.
Me imagino un modelo más productivo, con el Instituto Nacional de Colonización y Mevir, donde lleguen al lugar donde van a vivir y aprendan a ordeñar vacas o plantar tomates. No he hablado con nadie de esto todavía, es una idea que tengo en la cabeza.
El exprisionero que no firmó, ¿se puede ir?
Nosotros tenemos que cumplir con la ley de refugiados, ellos son refugiados en absoluta libertad dentro del país. No podemos vigilarlos ni custodiarlos, son hombres libros. El día que se quieran ir se pueden ir.
Es un trámite de una persona normal, perdiendo en ese caso la condición de refugiados. Pido que no miremos una solidaridad barata, sé que cuesta y que hay familias que no tienen esos $15.000 que les vamos a dar a ellos. Cruz Roja se encargará de los pasajes de los familiares que quieren traer, eso depende también del tipo de casa que vayamos a conseguir.
Yo me imagino los horrores que han vivido y me da la sensación de que hemos llegado a un punto en el cual yo pediría que se los deje vivir en paz, que se los deje reasentarse. El gran aporte que nos queda por hacer como sociedad es ver cómo los ayudamos a reinsertarse en la sociedad.
¿EE.UU. aporta algo?
Estados Unidos aporta a Acnur. Los $15.000 los pone Acnur y en parte Uruguay. Nosotros no esperamos nada de Estados Unidos, tendría que ser un acto voluntario. Eso podrá tener eventualmente una vía civil para tratarse.
¿Se hizo alguna gestión para limitar la salida de los refugiados?
Nosotros recibimos esto del gobierno anterior, no conocemos el detalle de las conversaciones. Yo creo que no hubo ningún condicionamiento de ese tipo. Lo que yo he hablado con ellos, ellos quieren mostrarle al mundo o reclamarle una presión internacional de tal manera que la cárcel de Guantánamo se cierre.
Para eso debe haber voluntad del Congreso de Estados Unidos y de los prisioneros que demuestren que no van a ser un problema para el país que los reciba. En Uruguay no ocurrió ningún incidente que se pueda considerar anormal.
Hablemos de Brasil: ¿cuál es la importancia de la reunión entre Vázquez y Dilma Rousseff?
Es muy importante porque el mundo está teniendo un cambio fundamental en los flujos comerciales, con China como principal motor. Hay una proliferación de Tratados de Libre Comercio y de preferencias arancelarias, de bloque a bloque, en los cuales el Mercosur no puede quedar afuera.
El 50% de las negociaciones comerciales que se hacen en el mundo se hacen bajo la forma de libre, de ese 50% el Mercosur mueve el 1%. El resto del mundo va por otro lado y nosotros tenemos que insertarnos en ese mundo para conseguir esas posibilidades de comercio. Nosotros tenemos 150 mercados a los cuales venderles y tenemos que mejorar el acceso.
Nosotros expresamos sinceramiento del Mercosur, no podemos tener las trabas que tenemos y flexibilidad, para hacer acuerdos en conjunto con el Mercosur. Es decir, que el Mercosur vaya y maneje distintas velocidades y tiempos. Nosotros no queremos abrirnos del Mercosur, queremos conseguir esa flexibilización.
Hay problemas, yo sé, si la Unión Europea me presenta una canasta del 96% de productos desgravados en un plazo determinado, pero si el 4% restante son los agrícolas, a mí no me sirve. Eso es lo que estamos por negociar.
¿Brasil está en la misma sintonía?
Sí, Brasil está en la misma sintonía. Las autoridades así lo han manifestado. Hay un marco muy aprovechable.
¿Lo habló en su reunión con Timerman?
No hablamos mucho de eso, la agenda con Argentina es otra y yo quiero ver si podemos avanzar en esa agenda con esos problemas. La agenda con Argentina hoy son los canales, la navegabilidad, etc. En UPM tenemos que lograr que se puedan presentar los informes del Comité Científico. Pero estamos intercambiando y hay cambios de figuras además, que eso siempre ayuda.
¿Está planificado un encuentro entre Vázquez y Cristina Fernández?
No todavía. Están en un año de elecciones, es un año complejo para ellos y nosotros no queremos interferir.
¿Influye en algo la relación que tuvo Vázquez con Kirchner y la que tiene con CFK?
Yo sé que las elecciones están operando como una barrera, son procesos muy concretos donde las relaciones personales inciden pero no a tal punto de incidir en los temas de los países que tenemos que encarar y solucionar. Lo que sabemos es que habrá un cambio de presidente, y después de eso tenemos que encarar una nueva etapa, con una agenda propositiva.
En Panamá, Vázquez planteó la posibilidad de comprar energía excedente a Paraguay.
Se va a tratar el tema, Paraguay además de las dos grandes represas tiene una más al sur, de ahí se podría llevar energía al suroeste de Río Grande y al Uruguay.
¿Qué pretende Uruguay con la Alianza del Pacífico?
Uruguay está como observador, hay una reunión en Perú. Es un acuerdo que tenemos que mirar. Puede ser que Uruguay ingrese. Lo que pasa es que hay una cuestión geopolítica que también hay que mirar.
¿Cómo continúa la negociación por el TISA?
Lo primero que tenemos que saber es cuáles son los alcances de los acuerdos, qué acuerdos hay, cuáles son las actitudes ofensivas o defensivas. El TISA es un acuerdo general de servicios que en su gran mayoría tiene las mismas normas que tiene el acuerdo general de servicios de la ONG. Muchas de las normas están metidas en los acuerdos del Mercosur y muchas otras son parte de legislación nacional. Sobre eso no podemos discutir. En julio habrá otra ronda, igual a las doce anteriores que hubo. Uruguay seguirá observando y quizá hagamos una listas de excepciones; serían los monopolios seguro: el agua, la electricidad, el petróleo.
Fernando Gambera, del Pit-Cnt dijo: “Nosotros tenemos una posición contraria, nos parece que es un ambiente en el que son más riesgos que beneficios los que puede haber”.
¿Cuál es su opinión al respecto?
En una negociación es mejor ser plurilateral que bilateral. Si hay otros países que están negociando servicios, me parece que es mejor que hacerlo bilateralmente. Hay un riesgo que es que nosotros no tenemos moneda de cambio, pero no estar tiene un costo altísimo. Por ejemplo, los tecnológicos de Uruguay que venden productos a Estados Unidos corren el riesgo de dejar de hacerlo porque Estados Unidos decida comprarles a países dentro del TISA. No hemos tomado ninguna decisión, si lo encontramos perjudicial no lo firmaremos, no vamos a firmar nada que comprometa al desarrollo nacional.
¿Hay preocupación del gobierno por Venezuela?
Ha mejorado. No voy a hacer una cruzada por este tema, ya se habló, ya se dijo, creo que la situación ha mejorado. No somos tutores de Venezuela pero las elecciones parlamentarias serán importantes.
Además, Nin Novoa expresó su opinión con respecto al gobierno de Dilma Rousseff y los problemas que atraviesa, y lo mismo respecto al gobierno de Michelle Bachelet.
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