Esto demostraría que el escándalo se extiende más allá del gobierno de Dilma Rousseff. José Dirceu ya estaba preso por otro caso de corrupción.
La operación Lava Jato que investiga una trama de sobornos y lavado de dinero en Petrobras, la petrolera estatal de Brasil, se acerca cada vez más a la cúpula del gobierno. En la mañana de este lunes, la Policía Estatal detuvo a José Dirceu, expresidente del Partido de los Trabajadores y exministro entre 2003 y 2005 del gobierno de Lula da Silva, junto con quien ayudó a fundar el partido.
El jerarca está acusado de liderar la trama corrupta en Petrobras cuando todavía era ministro; se afirma que se beneficiaba de desvíos de dinero ocurridos en la compañía. Dirceu ya había sido condenado en 2012 a siete años y once meses de cárcel por el caso de corrupción conocido como Mensalao, un sistema de sobornos a diputados y partidos para beneficiar al gobierno de Lula.
Con 69 años, Dirceu cumplió un año y medio en prisión, pero desde entonces estaba bajo arresto domiciliario en Brasilia. Según el Ministerio Público, él lideraba la red que otorgaba contratos a Petrobras a cambio de sobornos, con un modelo que replicaba el del Mensalao. Sin embargo, los fiscales creen que su enriquecimiento era personal y no partidario.
