El secretario general de la OEA recibió al opositor Henrique Capriles y despertó la ira en Maduro y sus referentes.
La relación entre Venezuela y el Secretario General de la OEA y excanciller uruguayo Luis Almagro se tensó cuando este último recibió a Henrique Capriles, un referente opositor del país caribeño y quien pidió un monitoreo de las elecciones venezolanas próximas.
"Volvemos a la primera página del guion que ha practicado el Sr. Capriles", dijo Elías Jaua, ministro de Comunas venezolano y vicepresidente del socialismo territorial. "Solicitar la injerencia extranjera, el intervencionismo, el tutelaje, el monitoreo". Jaua había dicho ya que Almagro era un "traidor de la unión sudamericana" y un "antivenezolano" que busca estar bien con la derecha y la izquierda.
El presidente Nicolás Maduro fue breve al respecto: "Venezuela no es monitoreada ni será monitoreada por nadie".
Por otro lado, se cumplió el 61 aniversario de la muerte de Hugo Chávez, y hubo festejos en el país.