Nos pusimos manos a la obra y con mucho gusto.
Ingredientes
4 Muslos de pollo
1 cta de Pimentón dulce
½ cta de Pimentón picante
½ cta de Cebolla en polvo
1 cda de Miel
1 cda de Vinagre balsámico
2 cdas de Kétchup
1 cta de ajo en polvo
2 sobres de tomate concentrado
1 cta de Salsa Worcestershire
50 ml de Caldo de verduras o agua
Sal y Pimienta
Limpiar bien los muslos de pollo sacando piel y exceso de grasa. Reservar. Aparte mezclar todos los ingredientes de la salsa.
Calentar un poco de aceite de oliva en una sartén o cazuela, mejor si se puede llevar luego al horno, y dorar los muslitos, unos 3-4 minutos por cada lado.
Llevar a una fuente -si no se puede usar la sartén- y agregar la salsa por encima, mezclando bien. Tapar con papel aluminio y hornear durante 20 minutos. Destapar, girar las piezas, volver a tapar y hornear 15-20 minutos más.
Retirar el pollo y mantener en una fuente tapada. Desglasar la salsa que ha quedado añadiendo agua o vino blanco, si fuera necesario, al fuego. Cocer removiendo sin parar rascando el fondo con una cuchara o espátula de madera, hasta que espese. Servir el pollo con esta salsa reducida por encima.
Para acompañar:
Papas bastón al horno