¿Las arañas pueden volar? Una investigación de científicos uruguayos y argentinos arrojó nueva evidencia

Expertos estudiaron el fenómeno que sucedió en Uruguay en 2015 cuando se vieron campos repletos de telas de araña.

Cada tanto vemos reportes desde diferentes partes del mundo de campos repletos de telas de araña. Pero en 2015 este fenómeno se alertó por primera vez en Uruguay y en Argentina. Sucedió en la localidad de Vergara, en Treinta y Tres, en un momento de inundaciones.

El fenómeno tuvo gran repercusión porque no había antecedentes en nuestro país. Pero curiosamente se dio un fenómeno igual a 500 kilómetros de Vergara, en Lezama, y eso motivó a un trabajo de investigación en conjunto con investigadores de Uruguay y de Argentina.

Uruguay tiene una larga trayectoria en el estudio de las arañas. De hecho, en una nota publicada en El Observador en el 2019, se asegura que nuestro país es el segundo con más aracnólogos per cápita del planeta.

Hay cerca de 40 profesionales dedicando sus vidas al estudio de estos particulares artrópodos. Pero si había algo que todos estos científicos no habían podido ver antes en nuestro país era esto.

El fenómeno puso a trabajar a científicos para intentar entender los porqués que había detrás.

"Lo que hacen es, en momentos en los cuales se dan las condiciones adecuadas, suben a lugares altos, empiezan a largar un hilo de seda y se dejan llevar por la corriente área. Eso lo hacen cuando son muy pequeñitas", dijo a Telemundo la bióloga especializada en arañas Anita Aisenberg.

"Es una forma de alejarse de su familia para evitar la endogamia, entre otras cosas, no tener tanta competencia por recursos en el mismo lugar. Pero acá lo que veíamos eran arañas grandes, casi adultas", explicó.

En un estudio publicado en la revista Ecological Entomology, los investigadores uruguayos y argentinos cuentan que días antes en ese mismo lugar donde se reportó el fenómeno había ocurrido una inundación muy importante.

"Ante la inundación están practicando en conjunto este comportamiento que se llama ballooning que es como si se fueran volando con un globo para dispersarse de ese lugar a otro lugar que no estuviera inundado", dijo Aisenberg.

Así se comprobó que las arañas despliegan ese mecanismo para sobrevivir.

"Estos fenómenos tan masivos son infrecuentes es la realidad y en América Latina este se trataría del primero", aseguró la bióloga.

La rareza del hecho responde a que no solo alcanza que haya una inundación para que esto suceda. También son necesarias las condiciones óptimas de temperatura, humedad y presión atmosférica.

De esta forma, los investigadores creen que esto revela más sobre la capacidad de adaptación que tienen las arañas.

"Son capaces de responder muy rápidamente las arañas. Antes se creía que tenían comportamientos súper rígidos. Al día de hoy sabemos que son capaces de responder muy rápido y eficiente a estímulos del exterior. Y cambiar su comportamiento de acuerdo a lo que está sucediendo en el entorno", dijo la experta en arañas.


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