La sensación de la Eurocopa tuvo un muy mal desempeño ante les bleus, que pasaron a semis de su torneo.
La selección islandesa de fútbol tuvo una participación soñada en la Eurocopa 2016. Pasó de ronda contra los pronósticos más optimistas, con lo que logró el récord del país con menor población (apenas 330.000 habitantes) en llegar a la fase final de un torneo como la Euro. Y en octavos de final pasó a la mejor historia del balompié al eliminar a Inglaterra, y encima de atrás al haber arrancado perdiendo.
En cuartos de final llegó el turno de enfrentar a Francia, la selección local, y si bien los que siempre hinchan por el más humilde estaban con ellos, Islandia se topó con un muro de buen manejo de pelota y mejor definición. Francia mostró tal vez su mejor expresión futbolística en lo que va del torneo y los vikingos apenas pudieron descontar en el segundo tiempo para reducir la goleada, con un tanto de Sightorsson. En la primera parte del partido los bleus los superaban por cuatro goles.
Giroud abrió la cuenta desde temprano y Pogba puso el segundo con un cabezazo potente. Cuando el primer tiempo se iba, Payet remató cruzado de afuera del área para sellas la clasificación a semifinales, y casi en los descuentos Antoine Griezmann cerró una jugada fenomenal que arrancó con un pase desde el área azul hacia Giroud, que tocó de taco para dejar en carrera hacia el arco en soledad al futbolista del Atlético de Madrid, que la picó con calma por encima del golero islandés.
Cuando Islandia soñaba con recortar un poco más el resultado, Giroud puso el quinto y hundió las esperanzas de del Atlántico Norte. Sobre el final, Bjarnason consiguió el segundo para los islandeses.
