El delantero también fue escupido por riverplatenses que habían viajado a ver el Mundial de Clubes.
La ciudad japonesa de Yokohama se vio invadida por 18.000 hinchas argentinos que viajaron a ver la final del Mundial de Clubes entre River Plate y el Barcelona, miles de personas que revolucionaron el ambiente con bromas y firmas de autógrafos falsas.
Pero también hubo un aspecto negativo: Lionel Messi fue escupido e insultado, y Javier Mascherano fue insultado por su pasado riverplatense que no pesó en su desempeño con la camiseta blaugrana. Messi reaccionó ante los insultos de los hinchas, y el propio Mascherano y Luis Suárez debieron intervenir para sacarlo del medio.