Según las imágenes difundidas, la droga estaba escondida entre productos como budines de fabricación nacional.
La Aduana de Bélgica incautó un cargamento de más de dos toneladas de cocaína que llegó a ese país europeo en un barco que previamente estuvo en el puerto de Montevideo.
Según informaron medios locales, la incautación tuvo lugar el 28 de diciembre. En esa oportunidad, la Aduana del puerto de Amberes encontró 2,6 toneladas de cocaína escondidas en un buque que había estado en el puerto montevideano.
Según las imágenes difundidas, la cocaína estaba escondida entre productos como budines de fabricación nacional. Desde Portezuelo -empresa cuyos productos se utilizaron para esconder la droga- dijeron a Telemundo que la firma deslinda toda responsabilidad en el caso. Indicaron, además, que que cualquier persona puede comprar mercadería y enviarla al exterior.
Días antes, el 22 de diciembre, se habían hallado 1,24 toneladas de droga escondidas en un contenedor que llegó a Amberes en un barco procedente de Guayaquil, en Ecuador.
"La Policía Judicial Federal de Amberes está llevando a cabo una investigación sobre estos hechos de contrabando ilegal", indican las declaraciones de Aduana recogidas por medios locales.
En julio del año pasado, la Policía de Hamburgo (Alemania) incautó una embarcación con contenedores de sésamo que llevaba droga camuflada. En total se hallaron unas diez toneladas de cocaína. El barco partió de Paraguay y pasó por nueve puertos -incluido Montevideo- antes de recalar en el destino final.
