"Es una señal de que la fiesta se terminó en Ancap y en ALUR".
En esta línea, el senador colorado Pedro Bordaberry apuntó:
“Doble buena decisión. Nos parece que es lo adecuado. No podíamos estar en este momento, que el país está con apreturas económicas, teniendo una fiesta de gasto en una empresa que es del Estado, como es ALUR, que pertenece a Ancap. Nos parece que es buena la decisión del directorio de Ancap”.
En tanto, el senador por el Partido Independiente, Pablo Mieres, afirmó:
“El acuerdo era insostenible. Era una cosa que no tenía ninguna lógica. Parecía un mundo paralelo: los trabajadores de ALUR con un sistema de aumento que no tiene ningún trabajador, ni público, ni privado. Y con el agravante de que ALUR es una empresa muy particular: es propiedad de Ancap, y tiene un solo cliente, que es la propia Ancap, que le compra al precio que a ALUR le sirve para mantener un resultado positivo”.
Desde filas nacionalistas, el senador Álvaro Delgado estimó:
“Comparto la decisión que tomó Ancap. Me parece positiva. Es una señal de que la fiesta terminó en Ancap y en ALUR, que aquellos que vivimos no va para más. No puede haber convenios por fuera de la realidad, que estamos pagando todos los uruguayos con combustibles más caros, porque todo termina ahí”.
Por su parte, el senador por el Frente Amplio Marcos Otheguy señaló:
“Compartimos el posicionamiento del Poder Ejecutivo con respecto al preacuerdo que se había firmado entre ALUR y el sindicato, que claramente excedía las pautas salariales que el Ejecutivo ha mantenido y ha fijado para el conjunto de los trabajadores. Ese preacuerdo iba en una dirección que no se puede fundamentar, que no se puede explicar, en las condiciones que está viviendo el país actualmente y en la realidad que tiene el resto de los trabajadores del Uruguay”.
