La denuncia fue realizada por la propia ONG.
El hombre había llegado a Uruguay con su esposa y en enero del 2018 comenzaron a asesoras a la ONG, en representación de la fundación Iter Semilla Solidaria.
Su tarea era realizar talleres sobre cultivo de vegetales y clases de materias vinculadas a esa actividad, informó este jueves el semanario Búsqueda.
Lo hicieron durante tres meses en las instalaciones de Aldeas Infantiles en Parque Lecocq.
Dos adolescentes le contaron a un guardia de seguridad que el tallerista abusaba de los más chicos.
Tras una investigación interna se denunció a la justicia. El hombre huyó a Argentina pero fue capturado y extraditado.
Ahora fue condenado a seis años de prisión, y a reparar a las víctimas con un monto equivalente a doce de sus ingresos mensuales.
El hombre niega las acusaciones y apelará la sentencia.
