Ignacio Errandonea: "No hubo un compromiso para apretar la clavija y que este tema de los desaparecidos de una vez se solucione"

Cada 20 de mayo se conmemoran los asesinato de Zelmar Michelini, Héctor Gutiérrez Ruiz, Rosario Barredo y William Whitelaw. Desde hace 25 años, la fecha ha sido conmemorada con la Marcha del Silencio bajo la consigna "Memoria, verdad y justicia". Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos llama a decir "Presente" en memoria de los 191 desaparecidos que dejó el régimen militar en nuestro país. Este año, una vez más, Madres y Familiares llama a una convocatoria virtual.

Conmemoración de la Marcha del Silencio 2021

La marcha la estamos viviendo desde hace unos cuantos días. Nos conmueve la cantidad de gente que toma la iniciativa para no solo decir presente, sino para que ese presente esté acompañado de algo más. A quién se le hubiera ocurrido salir a correr para decir presente? Nos parece sano y respetable. La creatividad nos llena de alegría y nos conmueve realmente. Madres y Familiares desde hoy a la mañana temprano pusimos las fotos, las huellas con algo muy similar al año pasado. A las siete y media pedimos que no haya nadie en 18 y que todos estemos respetando las medidas de sanidad pero todos juntos reclamando por verdad y justicia.

La pandemia con todas las cosas que tuvo, aportó otras cosas que nos han permitido crecer un poco más. La marcha vemos que llega a todos lados y ese “presente” se escucha en todo el país. Vamos a tener que conjugar dos cosas. Es sano podernos abrazar un día para reclamar verdad y justicia, pero por otro lado, para años venideros cuando se pueda la hemos incluyendo la parte virtual y la parte presencial.

Aparición de documentos en la unidad de Artillería número 5

Saludamos al actitud del gobierno de hacerlo público, pero no puede ser a cuentagotas. El gobierno nos entrega. Queda más de la mitad del archivo. Esto es un “archivito” y le falta mucho y le faltan años.

Hay que tener cuidado con publicar la información. Me parece que debe ser público y de acceso a todo el mundo, pero hay partes que deben tener cuidado. Por ejemplo, un acta de interrogatorio. Los interrogatorios eran bajo tortura. Lo que el preso decía le era arrancado bajo tortura. Cuando se firmaba el acta, no siempre se tenía el acta de interrogatorio a la vista. Lo digo por experiencia. Yo firmé un acta encapuchado. Me fue arrancada la firma bajo amenaza de tortura. Si se utiliza como se ha usado para ensuciar a la gente, no nos olvidemos que los militares en los archivos pusieron lo que quisieron y lo que querían probar. No voy a decir que está bien o mal. Llamo a todos a tener cuidado. Son archivos de los militares que usaban determinado fin y no siempre está ajustado a la realidad.  El acta de interrogatorio generalmente está con otro papelito al costo con el cual la persona dice “fui tratado correctamente, fui tratado bien y fui alimentado bien”. Si no lo querías firmar, volvías al tacho.

Avance de la investigación

La información dice que ahí. Veremos si es posible. Veremos si amerita la documentación como prueba para que la Justicia intervenga. No hemos tenido respuesta. Es por eso que lo planteamos a nivel público. Estamos esperando eso.

Pensamos que el Gobierno puede tomar el tema. Históricamente reclamamos por esto. Desde la apertura democrática se negó la existencia de los desaparecidos. Desde el gobierno de Batlle con la Comisión de la Paz se trabajó en el tema y se avanzó. Lo reconocimos como sociedad que tenemos un problema. El primer gobierno de Sanguinetti cumpliendo con el art. Cuarto nombra a un militar en funcione y se llega en conclusiones de que no había detenidos desaparecidos.

Pienso que sería más sano mantener más información. A mí me preocupa que dos veces le planteamos al ministro de Defensa que había que dar la orden a los militares de entrega de toda la información. Dos veces el ministro nos respondió que toda la información que yo reciba se las voy a hacer llegar. No hubo un compromiso para apretar la clavija para que este tema de una vez se solucione. Este es el problema. Si esperamos a la buena voluntad de los militares, me permito dudar qué es lo que piensan los mandos militares de todo esto cuando hace poco dos acciones preliminares de Gavazzo no afectaban la acción. ¿Qué elementos puedo tener de confianza de que va a ser así lo que dijo el jefe del Ejército el otro día? No le tengo confianza. ¿Cuántas veces nos dijeron eso? ¿Manini no dijo eso? Por nombrar dos. Desde la salida de la dictadura, fue la mentira constante.

En diciembre de 2016 el comandante en jefe Manini Ríos entregó a la Secretaría de DDHH entregó documentación y muchos de eso era repetido, copias de rollos ya incautados de lo que se denominó Archivo Berruti y otros que no conocíamos. Han aportado información, pero muy a cuenta gotas que no nos permiten ir a la parte medular. Es difícil preguntar a los mandos militares. La institución militar siempre fue un Estado Dentro del Estado. Tienen  un poder y a una autonomía grande. Por eso, hace cierto tiempo vimos muy positivo el acuerdo que existe entre todos los partidos democráticos de que hay que solucionar el tema de los detenidos desaparecidos del país. Es hora que se construyan políticas de Estado para arrancarles la verdad a los militares.


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