El presidente de la AUF afirmó que “un Mundial, y más para un país como Uruguay, tiene otros aspectos más allá de los económicos: es una gran inyección de espíritu”.
Uruguay logró romper con el maleficio del repechaje y consiguió la clasificación directa para el mundial de Rusia 2018. Es la primer vez que la celeste lo logra desde que la Eliminatoria se disputa todos contra todos. ¿Qué balance realiza la AUF sobre estas eliminatorias para Rusia? ¿Qué expectativas hay sobre la nueva camada que asoma en la selección?
Abordamos el tema junto al presidente de la AUF, Wilmar Valdez.
Fue un momento de mucha felicidad. Se vivió con tranquilidad en la previa porque sabíamos que había grandes chances de ir directo al Mundial. Creo que fue una fiesta redonda, algo histórico que debemos valorar en su medida.
Un Mundial, y más para un país como Uruguay, tiene otros aspectos más allá de los económicos: es un gran estado de ánimo, el espíritu de todos se eleva. Es importante para las familias, para los niños.
Uruguay es la selección de Sudamérica que recaudó más por entradas. Más de un tercio de la población de Uruguay fue al estadio si se suman todas las entradas. El fútbol es de la gente.
Desde principio de año venimos trabajando con sponsors: hay tres o cuatro empresas con las que estamos a punto de llegar a un acuerdo. Creo que lo de anoche reafirma lo importante que es la selección nacional para el fútbol y para el país. Lo que recauda la AUF por la selección es el único ingreso realmente democrático, porque se distribuye en partes iguales para todos los clubes, ahí no hay ni chicos ni grandes. Ahí está la importancia de vender bien nuestros productos desde la Asociación Uruguaya de Fútbol. Esto es una gran inyección no solamente económica, sino de espíritu para todos los uruguayos.
Aprecio y valoro lo que ha significado todo este proceso de selección y su conducción, en todos sus aspectos. Hoy este proceso es un ejemplo para todos. Botijas de 20 años respetan a una persona que tiene mucha más edad como lo es el Maestro. Y hoy en la sociedad uruguaya se ha perdido el respeto por la autoridad. Sin embargo, la selección nacional demuestra otra cosa.
A nivel de selecciones, no existe ningún otro proceso que haya tenido la duración que tiene este, que terminará esta etapa de 12 años en Rusia.
Seguramente habrá uno o dos partidos de despedida en mayo.
