Terminamos la semana preparando este delicioso pastel de chocolate, caracterizado por su color rojo oscuro.
Red velvet cake
250 g de harina
30 g de cacao en polvo
100 g de azúcar
1 T de aceite
2 huevos
1 cta de sal
1 cta de vainilla
1 cucharita de colorante rojo en pasta
250 g de buttermilk (250 g de leche y 1 cucharada de limón)
1 cucharada de bicarbonato
2 cucharaditas de vinagre
Para el Frosting :
300g de queso crema
200g manteca pomada
400 g de azúcar impalpable
En un bol mezclamos la harina con el cacao y reservamos. Por otro lado batimos el aceite con el azúcar y vamos añadiendo los huevos. Añadimos el colorante, la sal y el extracto de vainilla y batimos. A continuación preparamos el buttermilk (añadiendo una cucharada de jugo de limón a un vaso de leche y dejándolo reposar 10 minutos).
Vamos incorporando al bowl la harina con el cacao y el buttermilk alternativamente y poco a poco. Empezando y acabando por la harina y el cacao.
Por último mezclamos el bicarbonato con el vinagre, lo removemos con una cucharita y lo añadimos a la masa.
Batimos todo de nuevo y engrasamos con aceite el molde. Vertemos la masa y la horneamos a 180º durante unos 40 minutos.
Para hacer el Frosting batir la manteca pomada y el queso a temperatura ambiente unos 2 o 3 minutos, hasta que esté esponjoso. Luego agregar el azúcar impalpable cernida, mezclar bien y utilizar para rellenar y/o cubrir.
