Interrogado si los episodios de violencia y amenazas contra integrantes de Villa Española habían sido orquestados, el dirigente de la AUF dejó a entrever lo dialogado en la reunión con la Mutual y el club: "Fue lo que dijeron".
El integrante del Consejo Ejecutivo de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) Eduardo Ache habló este viernes en el Estadio Centenario luego de la reunión que mantuvieron con dirigentes de la Mutual de Futbolistas, el encargado de seguridad de la AUF y representantes del club Villa Española.
La gremial de jugadores decidió detener la actividad este fin de semana, tras un comunicado emitido por Villa Española en el que su directiva anunciaba su renuncia producto de los episodios de violencia creciente que rodean al club desde hace semanas.
Si bien el presidente de la AUF, Ignacio Alonso, calificó de "reservados" los temas tratados en la reunión, Ache informó que en la mesa de diálogo estuvo la "convicción" de que "esto tiene vinculación directa con el poder político en la AUF, la disputa por la elección de 2023 en la asociación y los derechos de televisión".
De todas formas, aclaró que "hay que ser muy cuidadoso" en las acusaciones, puesto que "no hay pruebas concluyentes". "No voy a acusar a nadie, pero fue un tema central en la conversación", declaró en la rueda de prensa.
Interrogado sobre si los episodios de violencia y amenazas contra integrantes de Villa Española habían sido orquestados, Ache dejó a entrever lo dialogado en la reunión: "Fue lo que dijeron".
Vuelta de los Policías a la cancha
El directivo de la AUF designado por Nacional volvió a manifestarse a favor de la vuelta de la Policía a los escenarios deportivos. "Es una postura conceptual y filosófica: la función del Estado es dar seguridad. Tiene que darla. Lo decimos hace años desde que se tomó la decisión de sacarlos de los estadios (en el 2014). ¿Cómo vamos a terminar? ¿Con ejércitos privados? ¿Cada club armando su estructura de seguridad?", lanzó.
Ache enfatizó que "el Estado tiene la obligación de da seguridad a los habitantes" y que así como "interviene un club porque hay temas a corregir, la contracara es la obligación de dar las garantías (...) para que se puede ejercer la pasión por el club sin sufrir amenazas".
