En lo que va del año los salarios medios de los uruguayos han crecido 10,6%, esto significa cuatro puntos más de lo que crecieron los precios al consumo.
Esta recuperación salarial, y por lo tanto, aumento del poder adquisitivo de los trabajadores, está preocupando al gobierno porque es una tendencia que se mantiene desde el 2011 y que mediante el aumento del consumo puede presionar aún más a la inflación.
Desde el 2011, los salarios han aumentado un 19%, mientras que los precios lo han hecho solamente 14%.
Esta tendencia se da en un marco en el cual se están tratando de cerrar las negociaciones por Consejos de Salarios de aquellas ramas de actividad cuyos convenios vencieron el 30 de junio o aquellas que no tenían convenio y que el gobierno decretó ajustes vigentes hasta esa fecha.
Además, a fines de año, comienza la negociación del resto de los convenios salariales y cuando no se llega a un acuerdo el gobierno lo que hace es hacer una propuesta económica y en caso de no votarla sindicatos y empresas envía un decreto para ver estos ajustes.
Se prevé que las negociaciones sean conflictivas porque el Banco Central del Uruguay (BCU) ya reconoció que la tendencia subyacente de la inflación es superior a la prevista y que esto se debe al mayor consumo privado, por lo tanto al mayor poder adquisitivo de las familias.
