El gobierno del estado de Rio anunció que a partir del sábado estará prohibida la circulación en la playa, así como el funcionamiento de bares, restaurantes y centros comerciales para contener la propagación de la enfermedad.
La medida, que debe ser refrendada por las autoridades federales, regirá por un periodo inicial de 15 días.
El gobierno estatal advirtió que las fuerzas de seguridad podrán fotografiar y filmar a aquellos que infrinjan lo estipulado para abrirles una investigación por "crimen e infracción administrativa”.
La veda de bares y restaurantes exceptúa a los establecimientos situados en hoteles y posadas, para que puedan atender a las personas colocadas en cuarentena por sospechas de coronavirus.
También podrán permanecer abiertos supermercados, farmacias y servicios de salud.
El estado de Rio y la ciudad de Sao Paulo, principales focos de la pandemia en Brasil, ya se habían declarado el viernes pasado en "estado de emergencia", suspendiendo las clases, restringiendo los servicios comerciales y el uso de los transporte público.
El gobierno brasileño ordenó cerrar las fronteras a europeos y asiáticos así como con todos sus vecinos, excepto Uruguay.
Brasil acumula hasta el momento seis muertos y más de 600 contagios de COVID-19.
