El sismo de 7,8 grados en la escala Richter tuvo una réplica de 6,7 grados y juntos dejaron casi 4.000 heridos y una pérdida cultural incalculable.
Más de 2.500 personas murieron, 4.000 resultaron heridas y un patrimonio cultural incalculable ha quedado destrozado tras el terremoto de 7,8 grados en la escala Richter que este sábado ha sacudido Nepal, según las últimas estimaciones reportadas por el diario estadounidense Washington Post. Una réplica este domingo alcanzó los 6,7 en la escala y aumentó los destrozos. Se trata de la peor catástrofe natural que ha padecido este país desde 1934, cuando otro sismo dejó cerca de 8.500 muertos.
El terremoto tuvo su epicentro a 150 kilómetros al oeste de Katmandú, la capital de la nación asiática; afectó también a la India, donde se registraron más de 30 víctimas mortales, y al Tíbet, donde las autoridades chinas informaron de la muerte de al menos una docena de personas. También causó una avalancha en el Everest que ha causado la muerte a 19 montañistas, según comentó al diario estadounidense un coronel indio que participa en los rescates. Una enorme avalancha cayó sobre el campamento base del que parten los escaladores y lo enterró, y a la tarde del domingo todavía había personas desaparecidas. Entre los muertos hay un alto ejecutivo de Google.
La situación resultó catastrófica, ya que las 35 réplicas del terremoto siguieron hasta la tarde de este domingo y también fueron importantes y dejaron a la gente acampando en las calles por miedo a quedarse dentro de sus casas y sufrir más daños. Los rescatistas se encontraban en situación complicada, ya que fuera de Katmandú todavía es difícil determinar el alcance de los daños y las muertes. Helicópteros con rescatistas y provisiones no pudieron aterrizar y debieron ser desviados a Nueva Delhi en India, por ejemplo, debido a lo peligroso de la capital nepalí.
