"Coco" Parentini "aprovechó" una requisa a su celda para hacerle llegar a Heber y Mendoza las cartas con amenazas de muerte

"Lo veo como una presión para volver a una cárcel común", dijo Mendoza, que descartó esta posibilidad.

Un cuaderno con dos hojas escritas, una con una carta dirigida al "Señor Heber" y otra al "Señor Mendoza". Así presentó Erwin "Coco" Parentini, barrabrava de Peñarol y responsable de varios homicidios, su amenaza de muerte al ministro del Interior y el director del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR).

Luis Mendoza contó este jueves que el delincuente "aprovechó" una requisa a su celda de la "Unidad 25" de máxima seguridad para que un funcionario penitenciario viera el cuaderno.

"Cuando encuentra el cuaderno, se revisa y el privado de libertad le dice al oficial: 'Las dos cartas las escribí yo y aprovechó a entregarlas", relató.

Por este caso declaró Mendoza este miércoles ante el fiscal de Flagrancia Fernando Romano. Este jueves será el turno de Heber.

Consultado sobre la aspiración del preso, Mendoza respondió: "Lo veo como una presión para volver a una cárcel común. Si bien en la Unidad 25 se cumplen las Reglas Mandela, hay un régimen diferente, medidas especiales. Es una manera de presionar para ir a otra cárcel, donde puede conseguir un celular de forma abierta".

El jerarca recordó que durante su reclusión en una prisión común, Parentini ordenó el asesinato del hincha de Nacional Lucas Langhain y el ataque a balazos contra un parcial de Flamengo (fue baleado pero sobrevivió).

En este sentido, remarcó que desde que está recluido en la Unidad 25 "no se le ha encontrado ningún elemento prohibido ni celular". La unidad está ubicada en el predio del exComcar, pero no depende de esta institución, sino directamente de Mendoza, que reconoció que en la otra unidad "el sistema es permeable" y existe la "corrupción", por lo que podría conseguir teléfonos y seguir cometiendo delitos.

Sobre la reclusión en la unidad de máxima seguridad, remarcó que el comisionado parlamentario, Juan Miguel Petit, confirmó que se cumplen los parámetros marcados por las Reglas Mandela. "Hay una hora libre al día, que no puede ser el momento del almuerzo. Pero tenemos que elegir con quién está porque son personas de alta peligrosidad", señaló.


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