Petit afirmó que “la rehabilitación no es una ciencia exacta”, pero que “en la enorme mayoría de los casos, el trabajo de rehabilitación mejora las condiciones de la persona”.
¿Un femicida se puede rehabilitar? ¿Y un abusador? ¿Y un femicida y abusador como Anderson Sosa, el hombre imputado por el crimen de Bárbara Prieto en Rivera? A esas preguntas respondió este viernes el comisionado parlamentario para el sistema carcelario, Juan Miguel Petit.
La fiscal Alejandra Domínguez solicitará a la Justicia que Sosa pase los próximos 45 años en prisión, la pena máxima establecida en el sistema penal uruguayo. Sosa, de 20 años, amenazó a Prieto (24) con un cuchillo, abusó sexualmente de ella y luego la mató. Ocurrió el martes pasado en el barrio Mandubí de la ciudad de Rivera, luego de que el hombre pasase la noche consumiendo alcohol y drogas. Actualmente está en prisión preventiva por 180 días tras ser imputado.
Consultado este viernes sobre si se puede pensar en un escenario en el que Sosa se rehabilite durante sus años en la cárcel, el comisionado carcelario señaló que pensar en los procesos de rehabilitación es equiparable a lo que sucede en los tratamientos de salud.
“Esto es como un sistema de salud. En la mayor parte de las situaciones, la intervención en salud puede mejorar, curar muchas veces a la persona, mejorarle y extenderle la vida, y a veces aunque no lo pueda curar puede mejorar su situación. A veces no”, apuntó Petit en rueda de prensa.
Petit afirmó que “la rehabilitación no es una ciencia exacta”, pero que “en la enorme mayoría de los casos, el trabajo de rehabilitación, que no es otra cosa que ejercer los derechos a salud, a salud mental, el tratamiento de las adicciones, la cultura, mejora las condiciones de la persona”.
Por eso, Petit considera que “hay que intentarlo en todos los casos”: “Hay muchos casos, como en salud, donde hoy en día tenemos más interrogantes que certezas. El Estado está para desplegar en todos los casos, sabiendo que en la gran mayoría de los casos se pueden lograr enormes resultados”.
“Y en los otros casos que nos golpean tanto, y que son un misterio cómo han llegado a provocar esos daños hacia otras personas, esos terribles daños, esos misterios de la vida hoy no tienen respuesta, pero el Estado tiene que trabajar sabiendo que la enorme mayoría de los casos se pueden lograr mejoras importantes en la convivencia”, agregó.
