Durand dijo entre otros que Jara reclama una antigüedad en Gas Sayago que se originó cuando ella estaba al frente de Ancap, por lo que "genera derechos no compatibles con el cargo público".
El vicepresidente de Ancap, Diego Durand, dijo que la expresidenta de la petrolera estatal y exgerenta de Gas Sayago Marta Jara "actúa como una mercenaria y no como una servidora pública".
El martes de esta semana la Justicia falló a favor de Jara, en su demanda contra UTE, Ancap y Gas Sayago. La ingeniera presentó en febrero una demanda laboral contra el Estado, al que le reclamó $ 7.200.000 más intereses y reajustes por supuestos salarios impagos, la indemnización por despido, aguinaldo, licencia, salario vacacional y perjuicios varios cuando estuvo al frente del proyecto de la regasificadora.
En entrevista con el semanario Búsqueda publicada este jueves, Durand dijo entre otros que Jara reclama una antigüedad en Gas Sayago que se originó cuando ella estaba al frente de Ancap, por lo que "genera derechos no compatibles con el cargo público".
"Es poco ético estar de los dos lados del mostrador", afirmó el jerarca. Añadió que el monto que reclama Jara es "como 60 veces el sueldo líquido de un director de Ancap" (sin ajustes).
"Ella dirigió la empresa como si fuera una exitosa corporación, luego decidió la liquidación y el despido de todo el personal y ahora reclama antigüedad incluyendo el periodo en el que era presidente de Ancap y el posterior al cierre de la empresa. Es triste", planteó Durand.
El lunes Jara publicó en Twitter un comunicado con sus descargos, un día después de que El País informara que la expresidenta de Ancap sería citada a declarar por el Juzgado de Crimen Organizado por las cuatro causas penales abiertas sobre la regasificadora, con un expediente que inició en 2013. La jueza María Elena Mainard dio lugar al pedido del fiscal Luis Pacheco, por lo que ocho exjerarcas, entre ellos Jara, comparecerán como indagados o testigos entre el 21 y el 27 de octubre.
La carta de Jara indica entre otros: "En una carrera de 30 años se encuentran muchas situaciones que exigen entereza para defender principios. Es un camino cuesta arriba, pero puedo decir que es el único que conozco para construir el respeto y el autorrespeto a largo plazo. Siempre he defendido mi trabajo como creo que cada uno defiende el propio, y como mujer estoy acostumbrada a levantar un poquito la voz para que me escuchen".
