La trabajadora sexual evadió durante más de un mes la entrevista con la Unidad de Víctimas de Fiscalía.
Paula Díaz, la trabajadora sexual que denunció ante la Policía a Yamandú Orsi por una agresión que no existió, intentó por todos los medios no tener que reiterar ante la Unidad de Víctimas de Fiscalía la acusación falsa contra el precandidato frenteamplista.
En el informe donde solicita el archivo de la causa, la fiscal Sandra Fleitas detalla el "derrotero sin fin" de Díaz, que incluye la simulación de problemas de salud y la intervención de Interpol.
Díaz denunció a Orsi el 13 de marzo en la seccional 10º de Montevideo. Como es habitual en situaciones como la relatada por Díaz, la Unidad de Víctimas de la Fiscalía se acerca a la denunciante "para contener, acompañar y efectuar un diagnóstico de la personalidad".
Sin embargo, nunca pudieron dar con Díaz. "Después de comunicarse en una primera oportunidad con la víctima, donde se le hizo una videollamada por las dos técnicas de la Unidad de Víctimas, ella comenzó a dar excusas de presentar problemas de salud, de depresión, etc. para no concurrir a entrevistarse. La citaron en múltiples oportunidades y con el apoyo de los funcionarios policiales incluso concurrieron a su domicilio, donde nunca lograron entrevistarla", narra Fleitas. Esto ocurrió en marzo y comienzos de abril.
Fleitas se preocupó por el comportamiento "evasivo y ambiguo" de Díaz. No porque pudiera estar evadiendo a la Unidad de Víctimas, sino pensando en que podía estar siendo "amenazada" a no hablar o que "incluso hubiera sido víctima de alguna agresión contra su integridad física".
Ante esto, el 11 de abril solicitó la actuación del Departamento de personas ausentes de Interpol.
Junto a esto solicitaron a la Justicia que accediera a una medida más para encontrar a Díaz: "Habilitar la geolocalización e intervención telefónica" de la mujer. El juez de Garantías lo permitió y Díaz fue ubicada. El 27 de abril accedió a concurrir a Interpol para hablar sobre su "desaparición" y se confirmó que no presentaba ningún tipo de lesión ni había sido amenazada.
En esa declaración reiteró la denuncia por agresión sexual, pero dijo que no estaba "plenamente segura" que el victimario hubiera sido Orsi.
En ese momento coordinó su postergada entrevista con la Unidad de Víctimas. Se fijó para el 4 de mayo, pero tampoco fue.
Ese día Romina Celeste Papasso reconoció a TV Ciudad que la acusación era falsa. Al día siguiente, la propia Díaz lo admitió en una entrevista con Canal 4. Ambas responsabilizaron a la otra por la ideación de la mentira.
Díaz fue condenada por simulación de delito y deberá cumplir una pena de 20 meses de libertad a prueba.
