El expresidente también dijo que la marihuana se ha transformado en algo cool y progresista sin que exista conciencia de los daños que produce.
El expresidente colorado Julio María Sanguinetti publicó una columna en el diario argentino La Nación en la que critica actitudes del gobierno de Tabaré Vázquez.
Sanguinetti primero se refirió a la postura tomada por el oficialismo respecto al gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro donde afirma que, si bien Vázquez y el canciller Nin Novoa piensan de forma similar a demás mandatarios en el Mercosur, están “atados por la fuerza sindical… y la mitad de su bancada parlamentaria” que le han dificultado “asumir la ostensible condición dictatorial del gobierno de Maduro”.
Detalló entonces que esa mitad del partido de gobierno “se alinea en torno del expresidente Mujica (aunque él ejerce un liderazgo distante), no es demócrata. Así de simple. Abandonada su etapa guerrillera, el viejo MLN Tupamaros es hoy una fuerza política que actúa dentro de la ley, pero cuya mayoría no cree en la libertad política”.
Después, el expresidente se refirió a la marihuana y criticó que esta no lleva la misma carga tributaria que el tabaco ni “la menor advertencia por los riesgos a la salud”.
Indicó que el presidente Vázquez no está de acuerdo con el comercio de la marihuana porque “realizó una campaña en contra del tabaco que le ha dado un gran reconocimiento internacional”. Sostiene entonces que Vázquez “vive molesto por esa contradicción, pero como todo este embrollo nació de una propuesta del expresidente Mujica, no tiene cómo oponerse”.
Sanguinetti además comparó los efectos del tabaco con la marihuana:
“Todo el mundo tiene claro los daños del cigarrillo, recordados con macabras imágenes en cada cajilla. Muy pocos tienen idea de los incuestionables efectos de la marihuana sobre la concentración, la memoria, la esquizofrenia, la capacidad cognitiva y aún el cáncer”.
El exmandatario por último dijo que han aparecido brotes de corrupción que no son de la magnitud de Argentina o Brasil pero “rechinan con la buena tradición uruguaya”.
