Fossati le adelantó al legislador "las perspectivas" de nuevas comparecencias, incluidas el CEO de Vertical Skies y "otra persona que sería el que le habría pedido directamente a Astesiano nuestras fichas con fines extorsivos".
Este martes declaró ante la fiscal Gabriela Fossati por el caso de presunto espionaje uno de los involucrados: el senador frenteamplsita Mario Bergara. "Fue una muy correcta conversación en donde obviamente ella nos confirmó que estaba tramitándose por cuerdas separadas esta parte de los chats de (Alejandro) Astesiano que involucraban esas fichas personales del senador (Charles) Carrera y de quien habla con el objetivo de extorsionarnos para que no ejerciéramos nuestro roles de senadores de la oposición", dijo tras su comparecencia.
La fiscal del caso le consultó al legislador si había tenido alguna percepción en los meses anteriores en relación a alguna persecución. "Dijimos que nosotros no, que discurría nuestra vida de manera absolutamente normal", contó Bergara en rueda de prensa.
Fossati le transmitió al legislador "el estado de situación" del caso; las pericias que se están haciendo, los análisis de los chats que todavía están en estudio y las comparecencias hasta el momento, incluida la de exjefe de seguridad de Presidencia. También, sobre "las perspectivas" de nuevas comparecencias, incluidas el CEO de Vertical Skies, Mario Javier Panizza, y "otra persona que sería el que le habría pedido directamente a Astesiano nuestras fichas con fines extorsivos", detalló.
"La cuestión discurrirá, entonces, en el tratamiento judicial que hará la Fiscalía, focalizando en los temas penales a partir de la evidencia que vaya surgiendo de los chats, del análisis que hacen los equipos técnicos de aquí de Fiscalía y también del apoyo que se tiene del Ministerio del Interior", adelantó.
Para Bergara, es "irrelevante" a través de qué empresa se llevó adelante el presunto espionaje. "Acá lo grave es que exista la posibilidad de que se busque con prácticas mafiosas trapos sucios de alguien a efectos de extorsionar, con miras a que uno retire una denuncia penal o no ejerza el rol institucional de senador", aseguró.
"Por lo tanto, lo grave es la cuestión institucional, la calidad democrática, las garantías que tiene que tener la población de que cada uno cumple su rol, los legisladores, el Poder Ejecutivo, la Justicia, y es absolutamente irrelevante o de tercer orden ver si es una empresa o si otra empresa", reafirmó.
El parlamentario de la oposición consideró correcto que las investigaciones vayan por carriles diferentes. "Los chats son un popurrí de posibles delitos de distinta naturaleza y me parece razonable que las cosas se investiguen cada una por su lado", comentó.
"En particular, este tema del espionaje con fines políticos en la arena política es de un nivel y de una gravedad muy diferente de lo que puede ser la expedición de pasaportes con documentación falsa o lo que puede ser el tráfico de influencia en licitaciones", agregó.
"Son temas que tienen peculiaridades diferentes, si bien todas surgen de una cuestión clara que son los chats de quien era el jefe de la custodia presidencial, que fue colocado ahí en un lugar de poder por parte del presidente de la República a sabiendas que era una persona con antecedentes penal", criticó.
Bergara informó que el otro involucrado, Carrera, ya declaró ante Fossati la semana pasada. "Confiamos en que la investigación de la Fiscalía tiene que ir a fondo", sostuvo.
Caso Marset
"Esto es un popurrí, no nos dan respiro", expresó Bergara al referirse al caso del narcotraficante uruguayo, Sebastián Marset. Los últimos acontecimientos, en particular, los que surgen de los chats entre la subsecretaria del Ministerio de Relaciones Exteriores, Carolina Ache y su par del Ministerio del Interior, Guillermo Maciel, "dejan en claro que se ocultó información y se dijeron cosas que no eran ciertas en el tramo de la interpelación".
"Si ella le trasladó o no al canciller está todavía por dirimirse, si no lo hizo realmente es un hecho muy grave", opinó. "Hubo comunicaciones del servicio diplomático uruguayo en Dubái llamando a la cautela, sugiriendo prudencia en el proceso. Todo lo contrario a lo que hizo Cancillería que le mandó exprés a Marset", agregó.
"Acá lo que hay es responsabilidades políticas y nosotros lo que aspiramos es que haya consecuencias políticas", aseguró. En esta línea, no descartó ninguna acción ni política ni parlamentaria por parte del Frente Amplio.
"Tenemos que arrancar con cuentagotas la información no hay tampoco buenas explicaciones. Por eso, creemos que todo este collar de perlas es muy grave y le hace daño al gobierno pero también a la institucionalidad", cerró.
