la mitad de los uruguayos mayores de 18 años pasa más de seis horas diarias sentado, la gran mayoría de ellos todos los días.
Casi todos los uruguayos consideran que realizar actividad física es importante para la salud. Esta conciencia ha ido creciendo con el tiempo, impulsada por información que se comunica en los medios, las recomendaciones médicas y también por políticas que han fomentado el ejercicio a través de distintas acciones o programas que se instalaron tanto a nivel nacional como departamental.
De hecho durante la pandemia si bien estas actividades se restringieron en espacios cerrados, existía unanimidad en los distintos actores sobre su importancia para el mantener sano tanto el cuerpo como la mente.
Y esta importancia es percibida por todos los grupos etarios, hombres y mujeres y más allá de la educación formal alcanzada. Pero en estos grupos se aprecian ciertos matices. Entre los hombres esta opinión está más extendida que entre las mujeres, y también es más extendida entre los menores de 60 y entre las personas más educadas.
Pero para que sea efectiva esta creencia se debe llevar a la práctica, y eso entre los uruguayos no tiene la fuerza que tiene la percepción de su importancia. La mayoría de los uruguayos hace algún tipo de trabajo físico, y el grueso lo hace todos los días. Aquí entran todos los trabajos fuera del hogar que implican movimiento, fuerza. Pero también entran aquí todas las tareas del hogar que también demandan esfuerzo físico.
También la mayoría de los uruguayos camina al menos diez cuadras al día, ya sea a diario o en forma semanal. Pero casi un cuarto no camina estas distancias nunca o si lo hace es en forma muy esporádica. Menos de la mitad de los uruguayos adultos hace gimnasia o sale a correr al menos una vez a la semana, y pocos lo hacen a diario. Un tercio practica un deporte, sobre todo fútbol.
Esta baja actividad es preocupante ya que la mitad de los uruguayos mayores de 18 años (50%) pasa más de seis horas diarias sentado, la gran mayoría de estos, todos los días.
Entre los hombres el ejercicio está más presente que entre las mujeres. La única actividad más presente entre las mujeres que entre los hombres es el trabajo físico (11 puntos de diferencia). Esto puede deberse a que aún las tareas del hogar que demandan esfuerzo físico son más realizadas en los hogares por las mujeres y menos por los hombres.
Más hombres que mujeres caminan, corren o hacen gimnasia, y más del doble de hombres que de mujeres practican algún deporte, donde el fútbol es la estrella y está muy enraizado en la cultura uruguaya. Y si bien está creciendo el fútbol femenino, aún está lejos de la universalización que tiene el masculino.
Como contrapartida mientras que el 53% de los hombres pasan más de seis horas sentado al día, entre las mujeres lo hacen el 46%. Ellos parecen estar más quietos que ellas, o pasan menos horas al día realizando esfuerzo físico.
Es más frecuente caminar al menos una vez a las semana entre las personas que tienen más educación formal y también el correr o hacer gimnasia, mientras que en la práctica de algún deporte también predominan éstos junto con las personas que tienen educación secundaria.
Esta diferencia a favor del grupo de los más educados se explica en parte por la mayor disponibilidad de recursos económicos para pagar gimnasios o profesores que facilitan el hacer ejercicio y también probablemente porque manejan más información sobre su importancia.
Pero también este grupo de personas más educadas que hacen más deporte, pasa más de seis horas al día sentados por el tipo trabajo que realizan, más de oficina o de escritorio.
En definitiva la conciencia de la importancia del deporte ya está presente entre los uruguayos, pero a muchos de éstos les falta llevarlo a la práctica, reflejarlo en acciones concretas que realmente mejoren la salud.
Y este cambio cultural no se hace solo, es fundamental la existencia de políticas públicas que lo promuevan que faciliten los espacios para realizar la actividad física y también los apoyos necesarios, sobre todo a aquellos que tienen menos recursos económicos como para realizar estas actividades en forma paga.
Las políticas públicas también deben facilitar la existencia de ofertas de ejercicio físico y de lugares de esparcimiento donde moverse con tranquilidad o usar el mobiliario destinado mejorar la calidad del ejercicio que se hace.
*Esta nota presenta los resultados de una encuesta nacional telefónica (a teléfonos fijos y celulares) de Cifra en todo el país: 802 entrevistados entre los días 21 y 30 de abril de 2021.
