"Nos comprometemos frente al mundo a poner en valor, conservar, mantener y divulgar esta obra única", dijo el presidente de la Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación, Willy Rey.
El Comité del Patrimonio de la Unesco declaró este martes a la Iglesia de Cristo Obrero de Atlántida (Canelones) Patrimonio de la Humanidad. La construcción fue diseñada por el ingeniero civil uruguayo Eladio Dieste en 1952 y se concretó en 1959.
El presidente de la Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación, el arquitecto Willy Rey, destacó el reconocimiento y agregó que pasará a “integrar un circuito importantísimo de turismo mundial”.
Sin embargo, explicó que “Uruguay adquiere un compromiso fundamental con la preservación de esa obra”. “Nos comprometemos frente al mundo a poner en valor, conservar, mantener y divulgar esta obra única”, dijo.
Según detalla la Comisión Nacional para la Unesco en Uruguay, los lugares declarados como Patrimonio de la Humanidad “son lugares de la Tierra con un valor universal excepcional”, a los que se busca “identificar y proteger".
Actualmente hay casi 1.200 sitios en los cinco continentes. “Constituyen un rico muestrario de lo mejor que la humanidad ha concebido en campos como la arquitectura, el arte, la religión y la industria, entre otros. Son la imagen tangible de la historia del planeta y de la civilización humana”, explica Unesco, y agrega que la desaparición de ellos “supondría un daño irreparable para la humanidad”.
Criterios para ser seleccionados
Los sitios deben cumplir al menos con uno de estos diez criterios de selección:
1. Representar una obra maestra del genio creativo humano.
2. Exhibir un importante intercambio de valores humanos, durante un lapso de tiempo o dentro de un área cultural del mundo, sobre desarrollos en arquitectura o tecnología, artes monumentales, urbanismo o diseño del paisaje.
3. Dar testimonio único, o al menos excepcional, de una tradición cultural o de una civilización viva o desaparecida.
4. Ser un ejemplo sobresaliente de un tipo de edificio, conjunto arquitectónico o tecnológico o paisaje que ilustra etapas importantes de la historia de la humanidad.
5. Ser un ejemplo sobresaliente de un asentamiento humano tradicional, uso de la tierra o uso del mar que es representativo de una cultura (o culturas), o interacción humana con el medio ambiente, especialmente cuando se ha vuelto vulnerable bajo el impacto de un cambio irreversible.
6. Estar asociado directa o tangiblemente con acontecimientos o tradiciones vivas, con ideas o con creencias, con obras artísticas y literarias de destacada importancia universal
7. Contener fenómenos naturales superlativos o áreas de excepcional belleza natural e importancia estética.
8. Ser ejemplos sobresalientes que representen las principales etapas de la historia de la Tierra, incluido el registro de la vida, procesos geológicos significativos en curso en el desarrollo de accidentes geográficos o características geomórficas o fisiográficas significativas.
9. Ser ejemplos sobresalientes que representen procesos ecológicos y biológicos significativos en curso en la evolución y desarrollo de ecosistemas terrestres, de agua dulce, costeros y marinos y comunidades de plantas y animales.
10. Contener los hábitats naturales más importantes y significativos para la conservación in situ de la diversidad biológica, incluidos los que contienen especies amenazadas de valor universal excepcional desde el punto de vista de la ciencia o la conservación.
Patrimonio Mundial en Uruguay
Uruguay cuenta a la fecha con tres sitios declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO: el Barrio Histórico de Colonia del Sacramento (inscrito en 1995 de acuerdo al criterio 4), el Paisaje Industrial de Fray Bentos (inscrito en 2015 según los criterios 2 y 4), y ahora la iglesia de Atlántida (con el criterio 4).
Por otra parte, en 2009 el candombe y su espacio sociocultural ingresaron a la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Uruguay también tiene al tango en esta lista, desde 2009, en conjunto con Argentina.
Además del reconocimiento internacional y la llegada de turistas, la declaración habilita una posible asistencia económica para obras de preservación y/o restauración a través del Fondo de Patrimonio Mundial.
Por su parte, cada país se compromete a preservar los sitios, a promover leyes que los protejan debidamente y a informar a Unesco de toda actuación interna o externa que pueda dañar su valor.
