El tiroteo se dio en el barrio Maroñas. El bebé y sus padres no estaban implicados en el hecho.
La audiencia de formalización fue muy expeditiva pues el caso, a ojos del fiscal y hasta de la defensa, estaba claro. El joven imputado por este hecho deberá cumplir prisión preventiva por 150 días por un delito de homicidio a dolo eventual debido a la participación en el tiroteo que le costó la vida al pequeño Lautaro, de tres meses.
El fiscal del caso, Juan Gómez, señaló tras la formalización de los hechos que los padres eran ajenos al tiroteo.
El hecho ocurrió el pasado viernes a última hora de la tarde cuando un matrimonio y su pequeño hijo fueron hasta un taller de reparación de autos y motos, ubicado en Juana Manzo y Eusebio Vidal en el barrio Maroñas, con intenciones de hacer negocios con una moto que había en el lugar.
Allí un joven de 19 años fue herido de bala, luego que se iniciara un tiroteo con otros jóvenes que estaban a pocos metros de él.
El hombre que venía en el auto se había bajado cuando se inició el tiroteo y se tiró al piso. Cuando terminaron los tiros se levantó y se percató que su pareja y su pequeño hijo de tres meses estaban baleados.
De inmediato se llevó a su pareja, a su hijo y al tercer herido a la policlínica Malinas.
Al llegar se constató el fallecimiento del bebé de tres meses, que tenía un disparo en la cabeza, y se derivó a la mujer a un sanatorio privado donde horas más tarde fue dada de alta.
El tercer herido se había fugado en primera instancia tras recibir los primeros auxilios en la policlínica, pero debió asistirse y fue detenido por la Policía.
