Laura Raffo discute los niveles descendientes de consumo de los orientales durante el año.
La cercanía de las fiestas, las jornadas de rebajas en los shoppings y los descuentos de algunas tarjetas de crédito reavivaron levemente el consumo de las familias uruguayas. Los shoppings afirman que en estas jornadas pasadas se lograron mantener los niveles de venta respecto al año anterior, pero se muestran preocupados porque en el total del 2014 los comercios van a sentir una baja de sus ingresos, presionados por un segundo semestre de menor consumo.
Repasemos cómo evolucionaron algunos rubros del comercio minorista: en el caso de los electrodomésticos la caída es muy clara. El encarecimiento del dólar ha perjudicado a estos locales, que deben enfrentar a un uruguayo que ya renovó sus bienes duraderos y no piensa gastar más por ellos.
La vestimenta de dama -que es un rubro termómetro- cayó en el primes trimestre y se recuperó muy levemente en el segundo y tercero. Entran aquí factores como los descuentos de tarjetas que implican menos facturación para el comerciante y también la llegada de grande retailers como Forever 21, que presionan a la baja los precios y afectaron los márgenes.
Finalmente, las agencias de viajes: el uruguayo está viajando más.
En este año 2014 probablemente el consumo de las familias tenga un nivel expansivo leve (4%), pero esta expansión va a estar más vinculada con las compras en el exterior que con las realizadas en el mercado local. Estas compras han llegado ya a los 1.400 millones de dólares, de los cuales el 60% se procesa en Argentina.
Los comerciantes están viendo una caída en sus ventas (mucho mayor para quienes venden bienes durables) y sin duda se está sintiendo una baja de la rentabilidad con precios que se están ajustando por debajo de la inflación.
