Desde hacía un año y 11 meses que estaba prófugo, hasta que hoy fue capturado en Brasil.
El mafioso italiano Rocco Morabito fue capturado este lunes en un hotel en la ciudad brasileña de João Pessoa, un año y 11 meses después de haberse fugado de la ex Cárcel Central de Montevideo.
A las 23:00 horas del 23 de junio de 2019, Ezequiel Díaz, Matías Acosta, Leonardo Sinopoli y el mafioso italiano lograron fugarse de la prisión ubicada en el centro de Montevideo donde cumplían arresto administrativo a la espera de una extradición.
Morabito ocupaba la celda Nº24 del sexto piso de la cárcel. Esa noche no funcionaban las cámaras de seguridad. Cuando se apagaron las luces de la prisión, el mafioso retiró las rejas de la ventana. Luego, junto a los otros reclusos que se fugaron, cortó un alambrado que cubría el tubo de ventilación y caminó unos pocos metros hasta un edificio lindero.
Los cuatro presos entraron por la ventana a la casa de Elide Iriarte, una mujer de 80 años que se encontró a los delincuentes en el living de su vivienda. Ellos le pidieron las llaves de la casa, y si bien la señora en primer término se negó y les preguntaba quiénes eran, finalmente obtuvieron su cometido. Salieron del edificio por la puerta principal.
Morabito se dirigió a una pizzería ubicada en Punta Carretas, donde fue recibido por su dueño, un ciudadano ruso que fue condenado por dar asistencia al mafioso.
Además de darle refugio, el propietario de la pizzería llevó a Morabito a la ciudad de Minas junto a los otros presos. También fue imputada una pareja que dio alojamiento a dos de los fugados.
La policía uruguaya logró recapturar a todos menos a Morabito.
Si bien varios funcionarios policiales fueron investigados, por el momento ningún funcionario del Instituto Nacional de Rehabilitación fue encontrado responsable penalmente de la fuga de los delincuentes.
La noticia derivó en la renuncia del entonces director del Instituto Nacional de Rehabilitación, Alberto Gadea, e incluso llevó al ministro del Interior Eduardo Bonomi a plantearle al presidente Tabaré Vázquez la posibilidad de dar un paso al costado, según confensó el jerarca en una entrevista concedida a Búsqueda meses más tarde.
