Tanto el Gobierno como el PIT-CNT han manifestado su gran preocupación por la situación que afecta a 250 trabajadores.
El pasado 21 de enero, la empresa Molino Dolores informó que enviaría a todo su personal a seguro de paro a partir del 1º de febrero, lo que tomó por sorpresas a los trabajadores.
“Es un golpe muy duro para una empresa de 250 operarios. Veníamos con un temporal que damnificó a 9.000 personas, con compañeros de trabajo que perdieron la finca. Aparte una empresa que tiene muchos operarios con 30 años de antigüedad. Imagínese con 50 años de edad… ¿dónde conseguimos trabajamos?”, se afirmó desde los trabajadores.
El encuentro que mantuvo el gremio con empresarios y negociadores del Ministerio de Trabajo en la Dinatra no arrojó grandes avances. No obstante, la empresa decidió suspender provisoriamente el envío de su plantilla al seguro de desempleo, a la espera de una negociación con sus acreedores, entre los que se encuentra el BROU, para destrabar su situación financiera.
Actualmente el molino está al día en el pago de salarios y afirma que cumplirá con sus obligaciones mientras continué en actividad.
