Luciana Bentancur llegó a su casa por la noche, le dio de comer a sus perros y prendió el aire acondicionado, no llegó a cenar, fue asesinada antes

Un repaso por los detalles que se conocen hasta el momento, de este violento homicidio en pueblo Castellanos.

La noche del martes cerca de las 09:00 horas Luciana Bentancur llegó desde Montevideo en ómnibus a la casa de sus padres en el pueblo de San Bautista. Allí recogió su auto ya que prefería no ir manejando a la capital. Interactuó brevemente y se fue para su casa en pueblo Castellanos a siete kilómetros de allí.

Llegó, se presume que le dio de comer a sus perros que estaban atados afuera, prendió la luz y el aire acondicionado porque era noche muy fría. No llegó a comer ni a tomar nada. Durante su estadía en Montevideo había comprado algunos implementos para las tareas que realizaba como odontóloga y se presume que por eso estaba en su consultorio cuando fue encontrada por una vecina más de 12 horas después.

Cuando la mujer entró vio que estaba la puerta del costado de la casa entreabierta con la llave puesta del lado de adentro y vio a Luciana tirada en el piso de su consultorio. La autopsia determinó que tenía más de 50 puñaladas en su cuerpo y signos de lucha. No faltaba nada de su casa, no había signos de que forzaran ninguna entrada, ni de agresión sexual.

El resultado de la autopsia al cuerpo de Luciana Bentancur confirma que recibió más de 50 puñaladas


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