Verduras, nutritivo y con mucho sabor para el almuerzo.
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6 medallones de calabacín
1 espinaca chica
400g ricota en bloque
1-2 huevos
Sal, pimienta y nuez moscada
1 lata tomates perita
1 cebolla
2 dientes de ajo
6 fetas de muzarella
Cocinar las rodajas de calabacín en el horno o sartén hasta que estén tiernos, pero no demasiado blandos. Reservar.
Calentar un poco de aceite en una cacerola y rehogar la cebolla bien picada. Añadir los ajos picaditos y los tomates apenas cortados junto con su jugo. Condimentar y cocinar hasta que espese. Reservar.
Pisar la ricota con un tenedor, condimentar y añadir las espinacas crudas bien picadas y los huevos apenas batidos. Mezclar bien.
Para armar, tomar una rodaja de calabacín cocido, cubrir con una buena cantidad de la mezcla de ricota, encima colocar la salsa de tomate y por último agregar una feta de muzarella.
Llevar al horno precalentado a 180ª hasta que el relleno de ricota esté un poco firme y la muzarella gratinada.
