Los representantes de las familias dicen que la medida va en contra de lo que pregona la comunidad científica.
Gabriela Arbeleche, de la Federación de Magisterio:
"Nos preocupa la improvisación de algo que era totalmente previsible, porque hace una semana esto se sabía que iba en gran avance. Podría haberse tomado con más tiempo, porque agarró no solo a las familias sino también a los docentes a una hora que era muy difícil organizarse. Nosotros lo que estamos pidiendo es que se cumpla con lo requerido para que la presencialidad sea segura, no es algo que implique demasiado, es tener las condiciones de más espacios, de las aulas móviles y espacios alternativos que se prometieron, de más cargos. Y que eso se pueda instrumentar que al ir ingresando gradualmente, además se haga con esas previsiones".
Representantes de las Familias Organizadas de la Escuela Pública se mostraron disconformes con esta medida de eliminar la presencialidad en los centros educativos. Afirman que va en contra de lo que pregona la comunidad científica, que las escuelas son lo último que deben cerrarse:
