Doble veto de Rusia y China en la ONU a proyecto de EE.UU. sobre Venezuela que proponía "elecciones justas"

Las fracasadas votaciones dejaron en evidencia la división entre las potencias mundiales en la ONU sobre qué camino seguir en Venezuela, sumida en una grave crisis política y con su economía en colapso.

Rusia y China vetaron el jueves un proyecto de resolución estadounidense en la ONU que urgía a celebrar elecciones "justas" en Venezuela, pero una contrapropuesta de Moscú también naufragó al no cosechar los votos necesarios.

Las fracasadas votaciones dejaron en evidencia la división entre las potencias mundiales en la ONU sobre qué camino seguir en Venezuela, sumida en una grave crisis política y con su economía en colapso.

El texto estadounidense, que también pedía el ingreso "sin trabas" de ayuda humanitaria, recibió el apoyo de nueve de los 15 miembros del organismo, entre ellos Francia, Gran Bretaña, Alemania, Perú y República Dominicana.

Hubiera bastado para aprobarlo, si no fuera por el doble veto de China y Rusia. Sudáfrica votó en contra, mientras Indonesia, Guinea Ecuatorial y Costa de Marfil se abstuvieron.

El texto ruso, que expresaba inquietud por "amenazas del uso de la fuerza" en Venezuela, obtuvo solo cuatro votos a favor (Rusia, China, Sudáfrica y Guinea Ecuatorial), siete en contra y cuatro abstenciones.

- "Una clara mayoría" -

"Lamentablemente, al votar contra esta resolución algunos miembros de este Consejo continúan protegiendo a (Nicolás) Maduro y sus cómplices y prolongando el sufrimiento de los venezolanos", lamentó en el Consejo el representante estadounidense para Venezuela, Elliott Abrams.

El alto diplomático estadounidense celebró no obstante que "una clara mayoría" haya votado a favor.

"¿Estamos hablando de días, de semanas, de meses" antes de que se vaya Maduro?, preguntó Abrams a periodistas tras la votación. "Esperamos que sea lo menos posible".

Alentado por Washington, el opositor Juan Guaidó, jefe del Parlamento que se autoproclamó presidente interino hace un mes y es reconocido como tal por más de medio centenar de países, desafía la legitimidad de Maduro.

"Estados Unidos parece haber olvidado lo que es el derecho internacional (...) Esto es una cortina de humo, lo único que desean es que haya un cambio de gobierno (...) disfrazado de asistencia para la gente", dijo por su lado el embajador ruso ante la ONU, Vassily Nebenzia. "Todos ya vimos esto en Libia, Irak, Siria, Afganistán".

El número dos chino en la ONU, Wu Haitao, sostuvo por su lado que "las cuestiones de Venezuela deben ser decididas por el pueblo venezolano".

El embajador de Caracas ante la ONU, Samuel Moncada, denunció tras la votación el "masivo robo de más de 30.000 millones de dólares" al pueblo venezolano por parte de Estados Unidos y Gran Bretaña, que han congelado sus activos.

Esos países "se presentan como salvadores" y al mismo tiempo "están robando, saqueando nuestros ahorros bancarios y reservas", dijo Moncada a periodistas.

El texto estadounidense aseguraba que el gobierno de Maduro ha provocado un "colapso económico", que es necesario impedir un mayor deterioro de la crisis humanitaria y llamaba al "ingreso sin trabas de ayuda".

También urgía a celebrar "elecciones libres, justas y creíbles" en presencia de observadores internacionales y describía la última elección de Maduro en mayo pasado como "ni libre ni justa".

- "Intentos de intervención" -

El texto de Rusia expresaba inquietud por "las amenazas de uso de la fuerza" en Venezuela e "intentos de intervención en asuntos" internos del país, apoyaba una "solución política" y "pacífica" de la crisis e insistía en que el gobierno de Maduro es el único que tiene autoridad para solicitar ayuda y coordinar su ingreso y distribución.

Rusia pretende "proteger a un régimen que quiere matar de hambre a su pueblo", dijo el embajador francés ante la ONU, François Delattre.

Aseguró que el texto ruso no admite la existencia de una crisis humanitaria en el país ni ofrece "ninguna solución".

Abrams volvió a insistir en que Estados Unidos está preocupado por la seguridad de Guaidó cuando regrese a Venezuela.

Guaidó, que se reunió el jueves en Brasilia con el presidente Jair Bolsonaro, aseguró que volverá a su país "en los próximos días, a pesar de las amenazas".

Venezuela atraviesa la peor crisis de su historia moderna, con hiperinflación y una escasez de alimentos y medicamentos que ha provocado el exilio de 2,7 millones de personas desde 2015.

(AFP)

Representantes de varios gobiernos se levantaron y se fueron de la sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU cuando iba a hablar el canciller de Venezuela

El diplomático insistió en que Estados Unidos y Colombia quieren ocupar militarmente su país y aseguró que Venezuela tiene algunos problemas pero no una crisis humanitaria.

El canciller venezolano Jorge Arreaza iba a comenzar a hablar cuando los delegados de una veintena de gobiernos se pararon y abandonaron la sala.

La acción fue coordinada por el Grupo de Lima, quien pide la salida de Nicolás Maduro del poder.

El jefe de la diplomacia venezolana igualmente hizo su ponencia en donde responsabilizó a Estados Unidos y Colombia por la situación de violencia y escasez en su país.

El canciller aseguró que Nicolás Maduro está dispuesto a trabajar con la ONU para discutir la necesidad de ayuda humanitaria aunque negó que haya una crisis de esa magnitud en su país.

Mientras EE.UU. pide en la ONU el ingreso de ayuda humanitaria extranjera a territorio venezolano, el canciller de Venezuela propone que Trump y Maduro se reúnan

"Nosotros denunciamos al gobierno de los Estados Unidos por organizar, por financiar, por liderar esta grosera agresión contra Venezuela", dijo el canciller.

El Gobierno de Estados Unidos anunció que pediría en la ONU el ingreso de ayuda humanitaria extranjera en Venezuela, al aumentar su apuesta diplomática para forzar la caída del gobierno de Nicolás Maduro que calificó de corrupto e incompetente.

En la reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU que tuvo lugar este martes en Washington, Estados Unidos anunció que pedirá el ingreso de ayuda humanitaria extranjera en Venezuela.

"Y debemos abordar los resultados desestabilizadores del reinado corrupto, fraudulento e incompetente de Maduro, que este fin de semana trajo la incivilidad y la violencia a las fronteras de otros dos estados miembros, Brasil y Colombia", dijo Elliott Abrams, representante de EEUU para Venezuela.

Estados Unidos piensa someter a votación esta semana en el Consejo un proyecto de resolución que exige "admitir la ayuda humanitaria en Venezuela", aunque posiblemente sea vetado por Rusia y China, que apoyan a Maduro. Para que la resolución sea vinculante debe tener nueve votos y ningún veto de los cinco miembros permanentes que son Gran Bretaña, China, Francia, Rusia y Estados Unidos. El canciller venezolano, Jorge Arreaza, dijo que lo que ocurrió el fin de semana fue "un golpe de Estado bien orquestado" por Estados Unidos y Colombia, y “un show" para culpar a Maduro si había un baño de sangre.

"Nosotros denunciamos al gobierno de los Estados Unidos por organizar, por financiar, por liderar esta grosera agresión contra Venezuela."

Arreaza llamó al Consejo de Seguridad a aprobar un proyecto de resolución preparado por Rusia que condene el eventual uso de la fuerza en Venezuela. Desde Washington, el canciller viajó a Ginebra para participar de la sesión del Consejo de derechos humanos de la ONU, donde propuso un diálogo entre los presidentes Nicolás Maduro y Donald Trump para ayudar a buscar una salida a la crisis venezolana.

"Y volvemos a plantear el camino del diálogo, el diálogo con Estados Unidos, sí. ¿Por qué no? Entre el presidente Maduro y el presidente Donald Trump. Que se reúnan. Ahí están las diferencias, trabajemos en las coincidencias entonces", dijo Jorge Arreaza, canciller de Venezuela.

Desde Madrid, el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez criticó la falta de voluntad de diálogo del mandatario venezolano Nicolás Maduro.

"Nicolás Maduro ha demostrado en reiteradas ocasiones que no tiene ninguna intención de dialogar y ha utilizado los sucesivos intentos de mediación como un instrumento para ganar tiempo y para perpetuarse en el poder. Su negativa en consecuencia a convocar elecciones presidenciales ha sido la demostración palpable de que Maduro no quiere una negociación sincera"

Sánchez reiteró que la convocatoria de "elecciones libres, democráticas, transparentes, y con todas las garantías" es la "única solución posible a la profunda crisis que vive Venezuela y rechazó una intervención militar.

Al menos siete personas han muerto en protestas contra el gobierno en Haití

Reclaman que el presidente Jovenel Moise renuncie a su cargo.

Varios países llaman al diálogo para superar una crisis política y económica que derivó en explosiones de violencia en varias ciudades.

Los manifestantes cortaron calles, quemaron vehículos y atacaron negocios mientras eran reprimidos por agentes policiales principalmente en la capital del país.

Las protestas piden que el presidente Jovenel Moise deje el cargo y que se llame a elecciones a solo dos años de haber asumido.

Acusan al mandatario de gobernar para una élite y de gastar el dinero entre el mismo gobierno y sus amigos mientras no se atiende a la creciente pobreza.

En un comunicado autoridades de ONU y OEA junto a los embajadores de Alemania, Brasil, Canadá, España, Estados Unidos y Francia llamaron a los actores políticos a un diálogo para buscar una solución a la crisis del país.

Las manifestaciones se producen después de que el martes el Gobierno declaró una urgencia económica, que implica reducir el costo de los bienes de primera necesidad, incrementar el acceso al crédito de las pequeñas empresas, para intentar superar la crisis.

Las manifestantes también exigen justicia en las supuestas irregularidades en el programa Petrocaribe, a través del cual Venezuela suministra petróleo a este país a precios diferenciales.

Una auditoría presentada la semana pasada por el Tribunal de Cuentas reveló irregularidades entre 2008 y 2016 en este programa, e involucró a 15 exministros y actuales funcionarios, así como una empresa que dirigía el propio presidente Moise.

Uruguay ante la ONU sobre Venezuela: "No respaldaremos jamás, en ningún ámbito, una intervención armada en ningún país de la región como pretendida solución a una crisis interna"

“La peor solución para el pueblo de Venezuela es profundizar su aislamiento internacional”, sostuvo Rosselli.

“Uruguay no respaldará jamás, en ningún ámbito, una intervención armada en ningún país de la región como pretendida solución a una crisis interna”, enfatizó Elbio Rosselli, el embajador de Uruguay ante Naciones Unidas (ONU) al intervenir en el Consejo de Seguridad reunido este sábado 26.

Reiteró la posición uruguaya junto a México, países que “llamaron a todas las partes, tanto internas como del exterior, para reducir las tensiones y evitar una escalada de violencia”.

Agregó que “conforme a los principios del derecho internacional urgieron a todos los actores a encontrar una solución pacífica y democrática frente al complejo panorama que enfrenta Venezuela y propusieron un nuevo proceso de negociación incluyente y creíble con el pleno respeto al Estado de derecho y los derechos humanos”.

“La peor solución para el pueblo de Venezuela es profundizar su aislamiento internacional”, sostuvo. Agregó que “no habrá estabilidad ni paz en Venezuela sin un acuerdo político entre los diversos actores a través de un diálogo amplio y sin exclusiones que comprenda al gobierno, a todo el espectro político y a la sociedad civil”.

Manifestó que el “diálogo no es una sucesión de monólogos sino que se requiere escuchar y comprender los puntos de vista de la otra parte y procurar un entendimiento”.

En referencia a la migración de venezolanos, expresó que la actitud de Uruguay “ha sido de abrir las puertas sin rechazar al migrante en la frontera y además sin levantar muros”.

“Uruguay reafirma enfáticamente su vocación por el respeto al derecho internacional y la solución pacífica de controversias, el fortalecimiento de la democracia y la igualdad jurídica de los estados”, recalcó.

El nuevo gobierno de Brasil retiró al país del pacto migratorio de la ONU para aumentar los controles en las fronteras

Jair Bolsonaro aclaró que no se negará ayuda a los inmigrantes que la pidan.

El Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular de la ONU fue suscrito en diciembre por 152 países, entre ellos Brasil, durante la gestión del expresidente Michel Temer.

Pero el flujo de millones de migrantes venezolanos que saturaron los estados brasileños fronterizos hizo repensar la política al nuevo presidente quien dice que ayudará pero no en forma indiscriminada.

En Twitter Jair Bolsonaro dijo que el país debe ser soberano para aceptar a quien ingresa. "Nunca rechazaremos ayuda a los que la necesitan, pero la inmigración no puede ser indiscriminada. Se necesita buscar la mejor solución de acuerdo con la realidad de cada país", dijo. "Si controlamos quién dejamos entrar en nuestras casas, ¿por qué haríamos diferente con nuestro Brasil?", agregó.

Además de los venezolanos, en los últimos años Brasil acogió a miles de refugiados, principalmente haitianos y sirios.

Dos de los países que rechazaron adherir al pacto fueron Estados Unidos e Israel, con los que el Gobierno de Bolsonaro busca estrechar los lazos durante su gestión que comenzó el pasado 1 de enero.

Bolsonaro expresó su voluntad de salir del Pacto Migratorio la misma semana en la que fue firmado el acuerdo en Marrakech, pero la retirada se hizo efectiva este martes, después de que el Ministerio de Relaciones Exteriores notificara a las Naciones Unidas.

El presidente brasileño ya había manifestado su intención de establecer criterios para limitar el ingreso al país de venezolanos que buscan refugio en el país tras huir de la crisis política, económica, sanitaria y social en Venezuela.

Las autoridades brasileñas estiman que entre 700 y 800 venezolanos ingresan diariamente al país por Pacaraima, principal puerta de entrada de Venezuela a Brasil.

Sin los votos de Estados Unidos y Hungría, la Asamblea General de la ONU adoptó el Pacto Mundial sobre los Refugiados

El documento marca cuatro objetivos esenciales.

La Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó, el lunes, el Pacto Mundial sobre los Refugiados con 181 votos a favor, dos en contra y tres abstenciones.

El texto no contó con el apoyo de Hungría y Estados Unidos, que había manifestado que rechazó la parte que buscaba limitar las detenciones de los solicitantes de asilo.

“Estamos por cerrar este año con la contribunción financiera más alta de los Estados Unidos a la Oficina para los Refugiados. Esto no es para decir que el dialogo con la administración no es complejo, siempre lo ha sido también con las administraciones previas. Sigue siendo sobre reasentamiento, sobre la frontera, pero creo que hay un compromiso fundamental de los Estados Unidos. Habría esperado, por supuesto, que respaldaran el pacto institucionalmente, pero en sustancia creo que ese apoyo continuará ahí”, dijo Filippo Grandi, alto comisionado de la ONU para los Refugiados.

El documento marca cuatro objetivos esenciales: aliviar la presión sobre los países de acogida, aumentar la autonomía de los refugiados, ampliar el acceso a terceros países y ayudar al país de origen a crear las condiciones que permitan el retorno seguro y digno de los refugiados.

“Es un mundo duro en el que esos grupos de personas frecuentemente son estigmatizados, señalados, politizados, señalados como amenaza y creo que un mensaje más de que el pacto, ambos compactos, quieren transmitir, es que estas personas no solo merecen compasión, protección y solidaridad, sino que, cuando se les da la oportunidad, pueden hacer una contribución formidable a las sociedades que los albergan”, dijo Filippo Grandi, alto comisionado de la ONU para los Refugiados.

Al igual que el Pacto Mundial sobre las Migraciones, el de los refugiados no es vinculante.

Naciones Unidas dará ayuda a los países latinoamericanos que recibieron a migrantes venezolanos que huyeron de su país por la crisis

Según Naciones Unidas, más de 2,5 millones de personas dejaron Venezuela en los últimos años.

La ONU incluyó por primera vez a Venezuela en su plan humanitario anual, mediante el cual suministrará ayuda a los países de Sudamérica y el Caribe receptores de la mayor parte de venezolanos que abandonaron su país.

“Planeamos ayudar a los países vecinos de Venezuela para afrontar las consecuencias de los venezolanos que han llegado. Les vamos a proteger con 738 millones de dólares para esos países en 2019 para llegar a 2,2 millones de beneficiarios", dijo el secretario general para Asuntos Humanitarios de la ONU, Mark Lowcock.

El capítulo dedicado a la crisis venezolana requerirá una financiación de 738 millones de dólares con el fin de llegar a 2,2 millones de beneficiarios. Lowcock explicó que prácticamente todos los países de Sudamérica y varios caribeños recibirán ayuda, pero en proporción con la carga de venezolanos que han llegado a ellos.

Sobre la situación dentro de Venezuela, Lowcock mencionó que la ONU ha reforzado su ayuda en áreas clave y que hay disposición para hacer más si las autoridades locales están de acuerdo.

"Lo que estamos intentando hacer es reforzar nuestro apoyo en áreas como la sanidad y la nutrición. Y hay negociaciones que continúan en ese aspecto. Creo que hay un acuerdo en que la Unión Europea ayude en eso porque será algo muy útil y de ayuda para la gente que está sufriendo en Venezuela", agregó Lowcock.

La sección del plan humanitario dedicada a Venezuela indica que 2,6 millones de venezolanos han emigrado a causa de la crisis.

Sin embargo, la ONU ha constatado que en los últimos meses la vulnerabilidad de los venezolanos que emigran se ha acentuado, pues la mayoría ha caminado miles de kilómetros por varias semanas cruzando dos o más países hasta llegar a su destino.

"En 2019, un estimado de 3,6 millones de personas necesitarán de asistencia y protección, sin que sea previsible el retorno en el corto o mediano plazo", señala el plan de la ONU.

La ONU pide "hacer mucho más" para limitar las catástrofes climáticas

La 24ª conferencia de la ONU sobre el clima (COP24) empezó este domingo en la ciudad polaca de Katowice.

Los 200 países reunidos en Polonia para tratar de poner en marcha el Acuerdo de París deben "hacer mucho más" para limitar los impactos sin precedente del cambio climático, abogó la ONU el domingo, aunque parece poco probable que se dé una respuesta ambiciosa.

La 24ª conferencia de la ONU sobre el clima (COP24) empezó este domingo en la ciudad polaca de Katowice.

Los impactos del desajuste climático "nunca fueron tan graves" y tienen que obligar a la comunidad internacional a "hacer mucho más" para combatirlo, reclamó este domingo la mexicana Patricia Espinosa, secretaria ejecutiva de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.

"Este año debería ser uno de los cuatro más calientes jamás registrados. Las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera están en su punto más alto y las emisiones continúan aumentando", añadió en un comunicado divulgado en la 24ª conferencia la responsable sobre el clima de la ONU.

"Los impactos del cambio climático nunca fueron tan graves. Esta realidad nos dice que tenemos que hacer mucho más. La COP24 tiene que hacer eso posible", agregó Espinosa.

Los desajustes climáticos ya están afectando a "las comunidades de todo el planeta" y las "víctimas, destrucciones, el sufrimiento" que conlleva, "hace que nuestro trabajo sea más urgente", dijo.

Con el Acuerdo de París de 2015, el mundo se comprometió a limitar la subida de la temperatura a 2 ºC respecto a la era preindustrial, e idealmente a +1,5 ºC.

El reciente informe de los científicos del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), destacó la diferencia "neta" en el impacto que tendrían esos dos objetivos, que irían desde olas de calor al aumento del nivel del mar.

Pero los compromisos que hasta ahora han tomado los firmantes del acuerdo de París llevarían a un mundo a +3 ºC.

Puesto que el planeta ya ha subido 1 ºC, para mantenerse por debajo de +1,5 ºC, las emisiones de CO2 deberían reducirse casi un 50% para 2030 respecto a 2010, según el IPCC.

Los miembros del G20, excepto Estados Unidos, reafirmaron el sábado su apoyo al Acuerdo de París.

Pero "no podemos decir que los vientos sean muy favorables" de cara a incrementar las ambiciones climáticas, dijo Michel Colombier, director científico del Instituto de Desarrollo Sostenible y de Relaciones Internacionales (IDDRI), en alusión al contexto geopolítico.

Con una guerra comercial entre China y Estados Unidos y el escepticismo respecto al cambio climático de Donald Trump y del presidente electo brasileño, Jair Bolsonaro (que también mencionó una posible salida de su país del Acuerdo de París), "las estrellas ya no están alineadas", lamenta Seyni Nafo, portavoz del grupo África.

Decenas de miles de manifestantes salieron a las calles de Bruselas el domingo con motivo del arranque de la reunión de Polonia.

Con 65.000 personas, según la policía, los organizadores afirmaron que fue la más grande manifestación ocurrida en Bélgica sobre el cambio climático.

- Katowice, imprescindible  -

La cumbre de un día el lunes en Katowice, a la que solo una veintena de dirigentes confirmaron su asistencia, incluidos el primer ministro holandés y el presidente del gobierno español o los presidentes de Nigeria y de Botsuana, podría esbozar las intenciones del resto del mundo.

Pero, pese al llamado "diálogo de Talanoa" (una serie de encuentros en curso para intentar aumentar los objetivos), los observadores temen que la mayoría de Estados, deseosos de revisar sus compromisos para 2020, esperen otra cumbre convocada por el secretario general de la ONU en septiembre de 2019 en Nueva York para mostrar sus objetivos.

En cuanto a Polonia, anfitriona del acto y firme defensora de su industria del carbón, su principal objetivo es que se adopte el manual de uso del Acuerdo de París.

Así como una ley necesita de un decreto de aplicación, el Acuerdo de París requiere de unas reglas precisas para ser puesto en marcha, especialmente sobre la transparencia, o sobre como los Estados rendirán cuenta de sus acciones, su financiación o sus resultados.

"No hay Acuerdo de París sin Katowice", subrayó la presidencia polaca de la COP24.

Pero los debates podrían tornarse muy ásperos sobre esos temas sensibles, como la cuestión de la financiación Norte-Sur.

Los países desarrollados se comprometieron a aumentar a 100.000 millones de dólares anuales para 2020 la financiación de políticas climáticas de los países en vías de desarrollo. Pero aunque según la OCDE esos flujos vayan en aumento, muchos países del sur reclaman compromisos más claros para cumplir esa promesa.

(AFP)

Para la ONU el flujo migratorio generado por la situación en Venezuela está configurando una "crisis monumental"

Las declaraciones del alto comisionado de la ONU fueron realizadas durante su visita a la frontera entre Colombia y Venezuela.

El flujo migratorio generado por la situación en Venezuela está configurando una "crisis monumental", afirmó este domingo el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, durante una visita a la frontera colombo-venezolana.

Grandi destacó que tras su recorrido pudo comprender las dimensiones del éxodo, pese a que el gobierno de Nicolás Maduro insiste en negar la emergencia que ha desatado la hiperinflación y la escasez crónica de alimentos y medicinas.

Estar aquí simboliza "la voluntad de la comunidad internacional de estar cerca de Colombia en este esfuerzo muy importante de responder a una crisis monumental", dijo el enviado de Naciones Unidas.

Grandi añadió que se trata además de "un flujo complejo" y anticipó que después de su visita la ONU podrá canalizar más recursos para que Colombia siga atendiendo la llegada en masa de personas que huyen de Venezuela.

La ONU calcula que cerca de 1,9 millones de personas han dejado Venezuela desde 2015, la mayoría hacia países de la región.

Solo Colombia estima un flujo migratorio de un millón de personas por su territorio, y ha regularizado temporalmente a 820.000 venezolanos.

En una reciente declaración en Ginebra, Grandi precisó que "unas 5.000 personas abandonan Venezuela cada día actualmente", en "el mayor movimiento de población en la historia reciente de América Latina".

Nicolás Maduro: "Estaría dispuesto a estrecharle la mano al presidente de los Estados Unidos"

El presidente Donald Trump dijo no descartar una opción militar en el país caribeño.

La imagen llamó la atención. El martes, el presidente estadounidense comenzó su discurso ante la Asamblea General de la ONU alabando a su gobierno. Pero tras asegurar que su administración ha logrado más que casi cualquier otra en la historia de Estados Unidos, provocó risas entre los dirigentes presentes. Este miércoles a la noche, Trump aclaró que no se rieron de él, sino con él.

“Los medios falsos dijeron que la gente se rió del presidente Trump. No se rieron de mí. Pasaron un buen momento conmigo. Lo estábamos haciendo juntos. Pasamos un buen momento. Respetan lo que he hecho. Estados Unidos es respetado otra vez”, dijo el presidente de Estados Unidos.

A propósito de Trump, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró ante la Asamblea de la ONU estar dispuesto a reunirse con el mandatario de Estados Unidos, quien dijo en el que no descarta una opción militar en el país petrolero.

"El presidente de Venezuela Nicolás Maduro Moros estaría dispuesto, yo estaría dispuesto, a estrecharle la mano del presidente de los Estados Unidos y a sentarme a dialogar sobre los asuntos de las diferencia bilaterales y los asuntos de nuestra región”, expresó el mandatario venezolano.

Trump había dicho antes que "estaría dispuesto" a reunirse si Maduro lo desea, aunque aclaró que no está en su agenda. Maduro dio un discurso de 49 minutos en el que condenó la agresión permanente de Estados Unidos y fustigó al imperialismo y al capitalismo. "No hay un solo modelo económico, no podemos permitir que se nos quieren imponer un modelo económico único, un pensamiento único. No podemos permitir que se nos quiere imponer un modelo cultural único, un modelo político único", dijo Maduro.

Maduro negó nuevamente en la ONU que en su país exista una crisis humanitaria o migratoria, y aseguró que es un invento para invadir Venezuela y quedarse con sus inmensas reservas de petróleo, oro y gas. Por su parte, ante el mismo foro, el presidente de Colombia, Iván Duque, llamó a la comunidad internacional a aplicar sanciones que asfixien al gobierno de Nicolás Maduro.

“Estamos viviendo la crisis migratoria y humanitaria más indignante de la historia reciente de la región, por cuenta de una dictadura que aniquiló las libertades”, dijo Duque.

Vázquez exhortó a todos los gobiernos a trabajar juntos contra las enfermedades no transmisibles

El objetivo es bajar en un tercio el número de muertes por esas enfermedades desde ahora hasta el año 2030.

Vázquez participó en la tercera reunión de la ONU sobre enfermedades no transmisibles en Nueva York. Habló como copresidente de la Comisión Independiente de Alto Nivel de la Organización Mundial de la Salud sobre esas enfermedades.

Presentó el informe denominado “Es hora de actuar”, que exhorta a alcanzar acuerdos posibles que incluyan recomendaciones y compromisos de trabajo.

Vázquez dijo que se requiere también de la participación de la sociedad civil y del sector privado, aunque explícitamente se dejará afuera de esa convocatoria a la industria tabacalera.

"En esa tarea nadie sobra, todos somos necesarios. Por esa razón, queridas amigas y amigos, entendimos necesario incluir en nuestras recomendaciones la participación de otros actores fundamentales en la lucha contra esta pandemia, entre ellos la sociedad civil y el sector privado. No nos referimos y exceptuamos específicamente a la industria tabacalera, no vamos a permitir su involucramiento, es la única industria que mata a sus consumidores. Todos los que participamos de este proceso coincidimos en un punto fundamental: para vencer  las enfermedades no transmisibles es necesario contar con el compromiso político al más alto nivel y modestamente estamos llamando a todos los mandatarios de la ONU a trabajar juntos", dijo el presidente uruguayo.